11 Jul Los traductores también nos vamos de vacaciones

Parece una obviedad, ¿no? Pero, a veces, las cosas más obvias son en las que menos se piensa. En esta entrada te contaremos cómo nos organizamos los traductores autónomos para disfrutar de las vacaciones, de nuestra familia y seguir atendiendo a nuestros clientes.

Como muchos de nuestros clientes y amigos saben, este equipo de traductores denominado Traducción Jurídica es un equipo un tanto especial.

Quienes lo formamos, Ruth Gámez y Fernando Cuñado, somos pareja en la vida profesional y también en la personal. Estamos casados desde hace 16 años y tenemos dos niños pequeños.

Trabajamos juntos desde hace diez y nuestro proyecto (Traducción Jurídica) es una boutique de traducción legal y financiera que trata de dar un servicio de la más alta calidad a un grupo seleccionado de clientes.

Compaginar la vida personal con el trabajo no siempre es fácil. Y menos cuando los dos miembros de la pareja son autónomos y tienen su propia empresa familiar.

Aunque, eso también tiene algunas ventajas que procuramos aprovechar al máximo.

Una forma diferente de descansar

La principal ventaja de ser tu propio jefe es que puedes irte de vacaciones cuando quieras. No tienes que pedirle permiso a nadie ni coordinarte con los compañeros de la oficina.

No te lo vamos a negar, esta es una de las razones por las que dejamos el trabajo por cuenta ajena: ser dueños de nuestro tiempo.

Lo que es imprescindible es atender bien a las personas a las que sirves y no dejarlas nunca colgadas con algún proyecto importante. Para ello, lo que solemos hacer es informar a nuestros clientes habituales con suficiente antelación sobre nuestro horario de verano y sobre los días que no vamos a estar disponibles.

Desde hace ya algún tiempo nos reservamos tan solo unos poquitos días (5-6) de ausencia total. El resto del verano lo pasamos trabajando, pero, aprovechando que hay menos actividad, lo hacemos solo por las mañanas (de 9:00 a 14:00 h.) y descansamos por las tardes.

Esto nos permite seguir atendiendo bien a quienes confían en nosotros desde hace tiempo y, de paso, descubrir algún nuevo cliente que no encuentra servicio durante el verano.

Tenemos la suerte, además, de contar con un apartamento en la Costa del Sol donde pasamos la mayor parte del verano. Aquí nuestros hijos disfrutan de sus vacaciones, juegan con sus primos y abuelos y nosotros podemos pasar un montón de tiempo con ellos en la playa o en la piscina.

Es una fórmula un tanto peculiar, pero hemos descubierto que a nosotros nos funciona y a nuestros clientes también.

Viaje anual en familia

Uno de los rituales veraniegos que hemos fijado en los últimos años es el viaje anual en familia al extranjero.

El aeropuerto de Málaga (muy cerca de nuestra casa) es uno de los más grandes de España y en verano nos permite viajar prácticamente a cualquier parte del mundo. Una oportunidad así no podíamos desaprovecharla.

Si a eso le unes que a esta pareja de traductores les encanta viajar, conocer mundo y relacionarse con gente de distintos países, la idea de salir todos los años fuera de España tenía que ser una de nuestras prioridades.

Por otro lado, como todos los padres, queremos darles lo mejor a nuestros hijos, y pensamos que conocer mundo y viajar desde muy pequeños debe ser una parte esencial de su formación.

Nuestro mundo es cada vez más pequeño y el suyo, cuando crezcan, lo va a ser más todavía. Así que, cuanto antes descubran que existen muchos países distintos, muchos idiomas y muchas culturas diferentes, mejor para ellos.

Hemos estado ya en Francia, en el Reino Unido y este año nos decantamos por Italia. En concreto, por la ciudad de Venecia. Nosotros habíamos estado allí en nuestra luna de miel, pero no habíamos vuelto desde entonces. Ha sido muy especial poder visitar esta ciudad tan hermosa y singular con nuestros niños.

Los pobres han terminado un poco cansados de tanto andar, visitar iglesias, museos y conciertos. Pero sabemos que también se lo han pasado muy bien y creemos (o queremos creer) que estamos construyendo experiencias enriquecedoras que permanecerán durante mucho tiempo en algún lugar de su mente y de su espíritu.

Y, tú ¿cómo disfrutas de las vacaciones?

Pues esto es lo que hace durante el verano esta familia de traductores. Hemos recopilado también algunas fotos del viaje. Te las dejamos en la entrada para que nos conozcas un poquito más.

Si tú también quieres contarnos cómo pasas el verano o qué planes tienes para este año, hazlo, por favor, en los comentarios. Nos encantará saber un poquito más sobre ti.