¿Te cuesta conciliar en verano?

Si a ti también te cuesta conciliar trabajo y familia en verano, lee esta entrada. Te damos algunas pistas para no morir en el intento.

Menudo timo eso de la conciliación. 😒

Con pronunciar la palabreja parece que ya está todo resuelto.

¡Pues no! Solo estamos describiendo el problema.

Un problema común

Conciliar el trabajo con la familia es difícil, sobre todo en verano. Y los freelance no lo tenemos tan fácil como se cree. Sí, es verdad que los trabajadores por cuenta ajena lo tienen peor, pero no es un consuelo. En el momento de redactar estas líneas estamos escribiendo en la mesa del comedor con nuestra hija de nueve años desayunando en frente… y sin parar de hablar sobre lo que hizo ayer con sus amigos. 😅

En el Club de los Grandes Traductores hablaremos de eso mañana con Aída Ramos en un webinar de formación continua exclusivo para sus miembros titulado: Cómo conseguir el equilibrio. Reflexiones sobre conciliación, vida personal y autocuidado.

Si quieres saber cómo nos organizamos nosotros en verano, te lo contaremos. Por si te proporciona alguna idea. 👇

Refugio en el sur

Durante 10 meses al año vivimos en Valladolid. Allí tenemos nuestra casa, el colegio de los niños y la oficina. Todo a una distancia de 500 metros de casa. Todo muy bien organizado. Todo muy previsible. Con nuestras rutinas y horarios precisos. Pero termina el colegio y empieza el caos. 🤪

Para sobrevivir a ese caos veraniego decidimos, hace ya algunos años, mudarnos al sur de España durante los meses de julio y agosto. Otra decisión que tomamos hace tiempo fue la de no enviar a nuestros hijos a campamentos ni escuelas de verano, igual que no les enviamos a la guardería cuando eran más pequeños.

La razón es la misma por la que viajan con nosotros a los congresos de traducción (ellos felices de conocer mundo). Es algo coherente con nuestra filosofía de vida familiar y de que queremos pasar con ellos el mayor tiempo posible, aunque eso suponga complicarnos la vida un poco más. Vaya por delante que sabemos que muchos padres no tienen tantas opciones, porque sus trabajos no se lo permiten.

El hecho de mudarnos al sur de España en verano responde a varias razones:

  1. Tenemos actividades profesionales que podemos atender desde cualquier parte del mundo (o casi). 🌎
  2. Adoramos Málaga y la costa del sol. ⛱️
  3. Aquí tenemos un apartamento (en el que podemos vivir y trabajar con unos costes razonables, eso es algo importante 💸) que está estratégicamente situado al lado del de los abuelos y los tíos de nuestros hijos y por ello disfrutamos de ayuda y oportunidades de “conciliar”.

Procuramos trabajar todo lo posible durante las mañanas, mientras que muchas tardes las dedicamos a ir a la playa, a la piscina o a algún sitio cercano. En la piscina no suele faltar algún manual de traducción o derecho que leer y un bolígrafo para tomar notas.

Un equipo de lujo

Otra pieza imprescindible para que este sistema funcione es nuestro equipo. Hasta mediados del año 2020 lo hacíamos todo nosotros con muy poca ayuda externa. Pero ese año tomamos una decisión clave: si queríamos seguir creciendo sin renunciar a nuestro estilo de vida teníamos que incorporar más personas al proyecto.

Dos actividades que profesionales facturan más de seis cifras cada una no pueden llevarse como un negocio unipersonal… pero sí pueden ser un lifestyle business.

Así llegaron a nuestro equipo cinco colegas maravillosas 😍:

  • Tres tutoras y una responsable de marketing en el área de formación;
  • y una gestora de proyectos en el área de traducción.

Un equipazo que se ha mantenido con muy pocos cambios en los últimos años. Trabajan en modo freelance, pero hacen un montón de horas al mes para nosotros. Son estupendas profesionales y nos entendemos muy bien con ellas. Es un equipo pequeño, pero nos dan la estructura necesaria para atender a nuestros clientes y alumnos incluso en épocas complicadas como el verano.

Resumen

Pues así es como conciliamos, o intentamos conciliar, nuestras actividades profesionales con nuestra vida personal.

No ha sido fácil organizar esta forma de vivir y de llevar varios negocios al mismo tiempo, ni tampoco es sencillo mantenerla. Es un trabajo constante y cambiante. Las dificultades nunca desaparecen, solamente se transforman.

Además, somos ambiciosos. Estamos atentos a todas las oportunidades que pasan por nuestro lado y no renunciamos a ninguna de ellas, salvo que no encaje con nuestros valores o sea incompatible con el estilo de vida que hemos decidido llevar.

Y tú ¿cómo haces en verano para seguir atendiendo tu negocio y no morir en el intento? Si quieres contárnoslo, nos encantará saberlo.


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