La semana pasada os contábamos las cosas más importantes que hemos hecho en 2014. Hoy queremos compartir con vosotros los libros que hemos leído, los cursos a los que hemos asistido, las páginas más vistas de nuestro blog y alguna cosilla más.

Lo primero es lo primero, y antes de nada nos toca felicitaros a todos el nuevo año. Un poco tarde, sí, pero este año necesitábamos descansar y nos hemos tomado unos cuantos días libres. El 2014 ha sido un año «agotador». Lo segundo más importante que tenemos que hacer nada más comenzar el año es daros las gracias. Un enorme GRACIAS (con mayúsculas), por ser cada vez más los que seguís este blog y los que lo enriquecéis con vuestros comentarios. La comunidad en torno a nuestra página de Facebook y a nuestro Twitter tampoco para de crecer, y eso nos llena de alegría. Hay un montón de juristas y traductores ahí fuera interesados en el inglés jurídico y nos sentimos muy orgullosos de aportar un pequeño grano de arena para hacer más conocida nuestra profesión.

Este verano ha sido muy especial para nosotros y también muy diferente a los anteriores. Apenas hemos salido de nuestra casa y hemos tenido que renunciar a una buena parte del trabajo que solemos hacer en estas fechas por una cuestión puramente personal que hoy queremos compartir con vosotros. Hace algo más de un mes nació nuestro segundo hijo: una niña preciosa a la que hemos llamado Sofía.

Pues sí, los autónomos también tenemos derecho a descansar y a tomarnos unas merecidas jornadas de descanso. Este año, si cabe, y aunque esté mal que nosotros lo digamos, nos las merecemos más que nunca, pues desde septiembre del año pasado no hemos parado de trabajar a un ritmo verdaderamente agotador.

Nos encanta cerrar el año haciendo balance. Es una buena costumbre que te ayuda a saber si has conseguido lo que querías y a marcarte nuevos retos para el año que empieza: algo muy provechoso —y terapéutico― que os recomendamos a todos. Así pues, ahí va nuestro resumen.

Diciembre es un mes especial. Toca cerrar el año, hacer balance (el nuestro lo dejaremos para la próxima entrada) y enviar las tradicionales felicitaciones y regalos a tus clientes. En los últimos años se ha puesto de moda eso de mandar felicitaciones electrónicas. No es que nos parezca mal, ni mucho menos, es una buena forma de ahorrar dinero y mucho papel. A nosotros también nos preocupa el medioambiente, por eso imprimimos lo menos posible y reciclamos todo el papel que usamos. Pero en Navidad nos permitimos alguna pequeña licencia, pues nos gusta mandar las felicitaciones de toda la vida, las de papel. Este año hemos recurrido a Ángel Domínguez, nuestro diseñador de cabecera, para que nos diseñe unas bonitas tarjetas de Navidad.

Hemos terminado, hace pocos días, un apasionante curso de seis semanas de duración sobre el Derecho inglés (The English Common Law). El curso, impartido totalmente en línea por profesores de la London University, forma parte de los programas de formación abierta de Coursera y ha sido todo un hallazgo. Nos ha servido para profundizar en algo tan importante para nosotros —traductores jurídicos— como es conocer al detalle los pormenores del sistema legal del que parten la mayoría de los textos que traducimos. Nada más terminar el curso, y pensando en esto de la formación continua, nos ha venido a la mente otro de esos asuntos de los que queríamos hablar en este blog desde hace tiempo y que no es otro que el de la especialización de los traductores. Si hay dos cosas en las que creemos firmemente los miembros de este pequeño equipo y que, además, consideramos características esenciales de todo buen traductor, son éstas:
  1. La especialización en uno de los múltiples campos temáticos de la traducción.
  2. La capacidad de mantener una actitud abierta al estudio y no dejar nunca de aprender.

Los que nos seguís en las redes sociales y a través de nuestro blog habéis podido observar que, hace algunos días, hemos hecho un cambio de imagen importante. Hemos renovado nuestras fotografías y hemos cambiado de logotipo. Hace tiempo que veníamos pensando en ello y, por fin, lo hemos conseguido. ¡Renovarse o morir! dice la sabiduría popular.

Traducción Jurídica

Nuestra página web (https://traduccionjuridica.es/) es  relativamente nueva, tiene poco más de un año. Pero el logo y las fotografías que estábamos utilizando eran más antiguos. Concretamente, el logo lo diseñó un buen amigo para Ruth hace casi diez años. La verdad es que nos encantaba, pero no reflejaba nuestro trabajo en equipo. Por eso, hemos decidido reservarlo para la web personal que mantiene Ruth como traductora jurada (http://www.ruthgamez.com).